¿De dónde sale tanta violencia y tanto ensañamiento? Después de ver las imágenes de la brutal paliza que unos jóvenes dan a otro, rodeándolo y asestándole golpes sin piedad ni temor, más bien al contrario, con ensañamiento e ira, incluso riéndose, divirtiéndose y grabándolo para después compartirlo, no cabe duda de que está subiendo la escalada de violencia en la sociedad. Violencia ideológica, xenófoba y homófoba.
Esa violencia está creciendo sobre todo en los jóvenes. Pero ¿de dónde nace esta ola de violencia? Fíjense que coincide y mucho con algunos mensajes clave de algunos nuevos partidos en este país. Odio a la inmigración, odio a otras razas, odio a otras orientaciones sexuales. Resulta muy vistoso y popular ver hablar desde la tribuna a una especie de legionario con chaqueta mientras que las barbaridades que dice van penetrando en la sociedad para después acabar en la calle con las vidas de Samuel o de otros chavales.
Es muy bonito jugar a ser político sin tener en cuenta que tus mensajes van a ser recibidos por una sociedad suficientemente crispada como para que cualquier vaina con perilla acabe achuchando a la población en un sentido o en otro, tanto desde la izquierda como desde la derecha, desde ellos extremos. Aunque en este caso el sembrador de odio más indecente de este país ya sabemos quién es. Si tenía tanta avidez de ejercito y legión que se hubiera enrolado y nos habría dejado en paz.
La cuestión es que ahora nadie se hace responsable de haber sembrado esta semilla ni este germen. Ahora todos miran para otro lado y nadie va a cambiar absolutamente nada y seguirán lanzando mensajes de odio desde el púlpito sin ningún remordimiento. Deberíamos hacérnoslo mirar, sobre todo los votantes de estos partidos extremistas, VOX y Podemos.